El próximo 14 de marzo cierran las inscripciones de la ECU para su carrera en realización cinematográfica. Aprovechamos para repasar la carrera, a 20 años de su creación, y conversar con su actual coordinador sobre los puntos fuerte de la esta institución especializada en formar profesionales del cine.
La ECU fue creada en 1995 como parte de la Cinemateca Uruguaya, continuando el trabajo que realizaba en formación desde la década del ’70. Es autónoma a nivel financiero y administrativo, pero pertenece a la Cinemateca Uruguaya. Se trata de la primera institución en el Uruguay dedicada exclusivamente a la formación profesional de cine y video. “Su objetivo es capacitar en la utilización del medio audiovisual, incentivar la creatividad, la imaginación, el intercambio y la libertad expresiva de nuevos cineastas. La escuela contribuye, de este modo, al desarrollo de una cinematografía uruguaya en constante crecimiento”, explica un comunicado.
La carrera de realización de la ECU tiene una duración de siete semestres, con clases de cuatro horas diarias para todos los alumnos. Algunos sábados se dictan talleres, seminarios, charlas o clases extraordinarias. La ECU se propone que tras cursar las distintas materias, los alumnos egresen sabiendo cómo desenvolverse en los distintos roles que componen a la realización audiovisual: guión, dirección, fotografía, montaje, producción, asistencia de dirección, etcétera. A lo largo de la carrera los alumnos realizan unos 30 cortometrajes, en los cuales desempeñan diversos roles. El perfil de quien egresa de la ECU es el de un profesional capacitado para realizar proyectos que involucren cualquier formato de lo audiovisual: televisión, avisos publicitarios, cine documental o de ficción, videoclips, entre otros.
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El actual coordinador de la carrera, Enrique Buchichio, afirma que “los aspectos más fuertes y que diferencian a la ECU de otras propuestas tienen que ver con la formación teórica y práctica integral, en todas las áreas, que permite capacitarse para ejercer cualquier rol y para ser un realizador lo más completo posible, con una visión global y crítica del hecho artístico y también de los aspectos técnicos y formales de hacer cine”.
– ¿Por qué considerás importante estudiar cine y en qué consiste hacerlo en la ECU?
“En estos tiempos en que el acceso al registro y a la producción de contenidos audiovisuales está al alcance de la mano, cualquiera puede – en teoría – hacer una película con su celular y subirla a YouTube. Pero eso no implica hacer cine, necesariamente, ni tiene por qué tener valor artístico. El pasaje por una escuela de cine como la ECU tiene como objetivo el enseñar los procesos necesarios para hacer una película (o cualquier contenido audiovisual) de manera profesional, entendiendo en la práctica qué función cumple cada área y capacitando para ejercer cualquiera de esas funciones en el medio profesional. Además, y quizás sea lo más importante, permite aprender y entender la evolución histórica del cine y el lenguaje cinematográfico, debatir sobre lo que han hecho otros cineastas más o menos consagrados y por qué es valioso conocerlo, y reflexionar sobre lo que queremos contar nosotros como cineastas y narradores para llevarlo a imágenes de la forma más efectiva posible.
El otro aspecto fundamental que tiene el paso por una escuela de cine es conocer y relacionarse con otros semejantes que, como nosotros, tienen la intención de dedicarse a esto y los mueve la misma pasión, más allá de diferentes estilos e inquietudes personales. En la escuela no solo se aprende a hacer sino que se forman equipos de trabajo y se forjan amistades, algunos de ellos para toda la vida.”
Con respecto a los estudiantes que ingresan en primer año, que son cerca de unos 20 o 25 alumnos, Buchichio explica que son chicos y chicas que egresan del bachillerato (en su mayoría) y que tienen una gran pasión por el cine y una gran “curiosidad por entender cómo es el proceso de hacer una película y aprender sobre la historia del cine que, en general, desconocen”.
Enrique Buchichio, actual coordinador de la Escuela.
Uno de los actuales estudiantes de la carrera, Christian Orta (generación 2013), es el ganador por Uruguay de la tercera edición del certamen de cortometrajes organizado por DIRECTV y SundanceChannel. Fluir, trabajo de ficción de 2° año de la Carrera de Realización Cinematográfica, obtuvo un premio de 5.000 dólares para que el director inverta en su formación o en un proyecto vinculado a su formación, y “el pase directo a la gran final latinoamericana en la cual Cristhian representará a Uruguay por el premio final: una beca para un curso de cine en la Escuela de Artes Cinematográficas de la Universidad del Sur de California, Estados Unidos. Además, la Escuela de Cine del Uruguay, por ser el instituto al que asiste el ganador, recibió un premio de 5.000 dólares para volcar al desarrollo y la potenciación de su carrera de cine”.
Podés ver y votar el corto de Cristhian en: http://directvcinemaplus.com.uy/
Entre los egresados se destacan el propio Buchichio (Zanahoria y El Cuarto de Leo), Gustavo Hernández (La casa muda, Dios local), Gabriel Bossio (Joya), Germán Tejeira (Una noche sin luna), Gonzalo Lugo (Retrato de un comportamiento animal), Guillermo Kloetzer (Manual del Macho Alfa), Juan Álvarez (El cultivo de la flor invisible, Avant), Matías Ganz y Rodrigo Lappado (las series REC y El mundo de los videos). También productores tales como Micaela Solé (Norberto apenas tarde, Los enemigos del dolor) y Julián Goyoaga (AninA, Una noche sin luna); y decenas de técnicos, hoy profesionales del sector cinematográfico y audiovisual.
Además de la carrera en realización, la institución dicta talleres extracurriculares sobre varios aspectos de la práctica o la teoría cinematográfica, entre ellos de Música para Cine, de Guión Inicial, de Ambientación y Utilería para Cine, y el TAA (Taller de Arte Audiovisual para Niños y Adolescentes).
El TAA es una nueva incorporación a los diversos proyectos de formación de la institución, que surgió en el 2012. “La ESCUELA TAA busca fomentar y desarrollar sus habilidades expresivas, su capacidad observadora y creativa. Estudiar cine desde la infancia educa la mirada, promoviendo el desarrollo de sus propias formas de ver y de pensarse en el mundo” explica la página de la ECU. Tiene tres áreas expresivas: Artes Escénicas (teatro y expresión corporal), Técnicas Audiovisuales (fotografía, lenguaje audiovisual, guión, realización, música y sonido, edición digital y diseño gráfico) y Artes Plásticas (maquillaje y dibujo). Tiene una duración de tres años, y está pensado para dos franjas etarias: niños de 8 a 12 años y adolescentes de 13 a 17.
Por más información acerca de los cursos y talleres de la ECU dirigirse a la página oficial de la institución: http://ecu.edu.uy/
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