Mañana arranca el 34° Festival Cinematográfico Internacional de Montevideo. Y como todos los años sacamos la lapicera, el bloc de notas y nos marcamos las que queremos ver. Y como ahora tenemos una página web, se las compartimos a ustedes. Por supuesto esto no es ni el 10% de las películas que merecen ser vistas en estas dos semanas. Es tan solo una aproximación a nuestros gustos y expectativas, a lo que pensamos merece ser puesto como foco principal de la producción audiovisual actual. Así que aquí están, 11 películas que vamos a ver en estos días. ¿Por qué 11? La respuesta cliqueando aquí.
El Arrullo de la Araña (José Celestino Campusano, 2015)
Se ha definido el cine de Campusano como bruto. De hecho, quizás hayas sido el mismo director quién haya empezado a hacerlo. Películas como Vil Romance, Vikingo o Fango son sucias, desprolijas, precarizadas, con un registro a mitad de camino de la recreación de casos a lo Pare de Sufrir y el porno amateur. Por eso mismo también es consecuente y riguroso: sus mismos personajes pertencen a un mundo sucio y precarizado. Y Campusano no tiene ninguna intención de pasteurizarlos a ambos para caerle mejor a nadie. Cuando la crítica pedía que el cine fuera a las calles, en última instancia estaba pidiendo esto. Algo lejano de la mirada paternalista, populista, en si, edulcorada. Sus protagonistas de rostros agrietados recortados contra los paisajes más áridos de la periferia no habían sido registrados por el cine hasta que esta bestia empezó a filmar. No, doña, no son películas que nos canten al alma y nos llenen el ojo. No le interesa serlo. Y por eso hay que verlo.
La banda de las chicas / Girlhood (Celine Sciamma, 2014)
Hay dos buenas razones para querer ver esta película y son El Nacimiento de los Pulpos (2007) y Tomboy (2011), las anteriores de su directora Celine Sciamma. (ver trailer). Eso y una escena de estas chicas bravas bailando Diamonds de Rihanna en un cuarto de hotel.
Corazón de Perro (Laurie Anderson, 2015)
A Laurie se le murió el perro y el marido y en vez de quedarse llorando decidió hacer eso que a ella le sale tan bien: intelectualizar emociones, distanciarse a través de un humor gélido, pensar los procesos íntimos en contextos políticos y relacionar los eventos del pasado con el presente en una especie de trama surrealista. Sólo que en vez de hacerlo en un escenario decidió que esto era una película. Así que preparen los pañuelos y vayan abriendo la wikipedia. Laurie está de vuelta con nosotros.
Entre dos luces – Suárez. Primera Parte (Fernando M.Blanco, 2015 )
Los Suárez tuvieron una existencia prodigiosa y secreta. Que después de trece años de su separación sean más famosos e influyentes que nunca es prueba de su importancia. Este documental trata de sus comienzos, con especial énfasis en sus primeros dos trabajos (Hora de no ver y el oh mi dios no lo conocés porque no vas a youtube y lo escuchás ahora mismo Horrible) y está construido únicamente en base a imágenes de archivo: filmaciones caseras en vhs de toques, ensayos, grabaciones y guarangadas varias. Somos entonces testigos silenciosos de algo que ya ha pasado para intentar descifrar y apreciar de nuevo esas canciones hechas a prueba de tontos y en base a errores.
Lejos de Ella / Montauins May Depart (Jia Zhangke, 2015)
Pocos cineastas actuales piensan las consecuencias desastrosas de la irrupción del capitalismo como Jia Zhangke. Y pocos plantean experimentos narrativos tan extremos. Lo cierto es que una cosa va en función de la otra: en Platform, una film sobre la moda (entre otras cosas), los personajes justamente parecían no tener otra entidad que la que estuviese en boga en ese mismo momento. Aquí plantea un melodrama femenino en tres tiempos: pasado, presente y futuro. Cualquiera que haya visto una, cualquiera, de sus películas lo sabe: entrar en ellas es una experiencia exigente, pero esta siempre será recompensada.
Los Exiliados Románticos (Jonás Trueba, 2015)
Los Ilusos, la anterior película de Jonás Trueba, pasó sin pena ni gloria por nuestra ciudad y es una exquisitez del cine-meta-cine. Con Los Exiliados Románticos como apertura del Festival, su última película, tal vez cobre visibilidad local un joven cineasta que vale mucho la pena.
Taxi Teherán (Jafar Panahi, 2015)
El éxito del cine Iraní de los ‘90 y comienzos de este siglo en nuestro país es quizá el último hecho feliz del cine como evento público. Cinemateca 18 se llenaba con las funciones de El Viento nos Llevará (1999) de Abbas Kiarostami o con El Círculo (2000), de Jafar Panahi. Fue también una instancia de comunión entre público y crítica, extasiados ambos con la capacidad de estos artistas (y varios más) para reducir a su mínima expresión el recurso narrativo, con argumentos mínimos (donde el conflicto era tan sencillo como una niña queriendo comprar un pez dorado) y darles profundidad, belleza, importancia, con tan poco despliegue técnico, y tanta maestría técnica. El arresto domiciliario y la censura ejercida sobre el cine de Panahi, no le impidieron seguir filmando, a pesar de poner en riesgo su vida, produciendo las anteriores This is not a Film y Closed Courtain. Esta Taxi, en la que él mismo maneja un taxi por las calles de Teherán y conversa con los clientes (no se sabe cuánto de las conversaciones estaba guionado y cuánto es improvisación o entrevistas reales) es su tercera película desde la condena que le prohíbe dirigir por 25 años.
Tangerine (Sean Baker, 2015)
Tangerine es un grito desesperado. Dos chicas travestis se pasean por las calles de Los Ángeles buscando a un tipo que no aparece, trabajando y tratando de pasarla un poco bien mientras el resto del mundo en sus casas festeja la navidad. Con Starlet (2012) Sean Baker ya había dejado claro que había que seguirle el rastro. Con Tangerine lo ha confirmado filmando lo que para varios de nosotros es una de las mejores películas del año pasado.
Samuray-s (Raúl Perrone, 2015)
Nos juntamos a ver P3ND3JO5 (2013) y la odiamos en conjunto. Es lo más nuevo que vimos del argentino guerrillero que filma dos, tres, cuatro películas al año. Nos pareció pretenciosa, deshilachada, exagerada, preciosista, reiterativa. Nos gusta la prepotencia de Perrone, algunas de sus primeras películas (Labios de Churrasco, Zapada, Graciadió) y sobre todo el decálogo de su cine, pero ya no nos gusta mucho lo que hace con él. Igual, no nos damos por vencidos.
Una historia de locos (Robert Guédeguian, 2015)
Robert Guédeguian es de los cineastas contemporáneos con una de las filmografías más sólidas. Sus películas derrochan amor y preocupación por la condición humana, los ideales y los orígenes. Guédeguian visitó en 2014, junto con su mujer Ariane Ascarid (su gran actriz) la Licenciatura de medios y audiovisuales de la facultad de Bellas Artes y aseguró que el deber del cine era encontrar el comunismo del siglo XXI. Su mujer dijo que lo primero que hacía para interpretar un personaje era ponerse el calzado, porque uno camina de una forma porque algo tiene en la cabeza.
Una Juventud Alemana (Jean-Gabriel Périot, 2015)
La RAF (Red Army Fraction) ha tenido muchísima suerte con el cine. Quizás suene incorrecto, pero si vamos al caso, eran los terroristas más fotogénicos de todos los tiempos. Una prole urbana, intelectualizada, de clase media alta, exasperada por los enfrentamientos entre los movimientos estudiantiles y la policía y llenos de vergüenza por el pasado fascista de sus padres. El director Périot no utiliza nuevas entrevistas ni recreaciones. Su material de base es todo en base a archivos documentales, noticieros, cortos producidos por la misma organización. E incluso fragmentos de films de directores como Fassbinder, para que nos quede claro como el arte (o al menos el buen arte) suele (o solía) dialogar con la realidad.
